“Todos saben de una manera vaga que el lugar mas bello del mundo es -o era, desgraciadamente- el pueblo Holandés de Vondervotteimittiss”
“El diablo en el campanario” es uno de los relatos que mas me han llamado la atención de Poe, pues al momento que lo leí por primera vez me dí cuenta que era un trabajo muy peculiar, pues pude notar los elementos que dan nombre a la llamada “Sátira”… aunque ya nos tiene acostumbrados el escritor con este tipo de trabajos (pues hay mas cantidad de estos en su obra) este en particular tiene un tema que en lo personal me pareció con un gran trasfondo, pues en el, Poe ataca a esa llamada zona de confort, además de que supuestamente el escritor se basó en la ciudad de New York para darle vida e identidad al pueblo de “Vondervotteimittiss”.
Este relato comienza con la característica forma de narración melancólica de Poe, dando una detallada descripción de aquel pueblo que alguna vez fue el lugar mas tranquilo y reconfortante del mundo, sin dejar a un lado la sencillez y antigüedad del mismo.
En este pueblo, las personas llevan una vida tranquila, pero todos, inclusive los mas pequeños habitantes del lugar están apegados (por decirlo así) al reloj del campanario que se encuentra en el centro de ese lugar, pues según la historia que cuentan los mas viejos, ese reloj nunca se ha retrasado ni un poco en marcar las horas, los habitantes siempre están a la espera de que suene la campana que marca las horas para poder cerciorarse de que aún el reloj marca bien y está en perfectas condiciones.
Las características de este pueblo y sus habitantes son muy particulares, especialmente por aquellas que ellos defienden por sobre todas las cosas, por ejemplo; ellos dicen que incluso el habitante mas viejo del lugar no puede recordar algo que haya cambiado del pueblo desde que era niño, e incluso el insinuarlo es una ofensa muy grande. Igualmente ellos decían que no había necesidad de salir del pueblo y atravesar las colinas que lo rodean, pues aseguran que no hay nada más.
Lo interesante comienza cuando en una ocasión, minutos antes del medio día, los habitantes del pueblo se encontraban prestandole total atención al reloj en el campanario, pues estaban esperando el sonar de las 12 y con el, el de todos los relojes personales de cada uno.
Todo este “ritual” fue interrumpido por una extraña figura que a lo lejos se veía correr y saltar por las colinas, poco a poco acercándose al pueblo; por esta razón se comenzó a tener cierta desconfianza a ese extraño ser, pues tenia características muy extrañas, pues nunca habían visto a nadie bajar por las colinas, y tampoco habían visto ni tratado con alguien del exterior.
Realmente la presencia de este extraño “hombrecillo” fue algo que cambió el rumbo y las costumbres de Vondervotteimittiss, a tal grado que como comenté al principio de esta reseña, Poe lo describió como “alguna vez el lugar más bello del mundo”.
Espero que disfrutes de este gran relato y llegues hasta este punto, para que así conozcas el desenlace de esta serie de acontecimientos.
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